Los niños y niñas de Primero experimentan con los sentidos del olfato, el tacto… prescindiendo de la vista.
La maestra de la ONCE, que trabaja con una clase de Primero, trae antifaces para tapar los ojos de niños y niñas que experimentan con el olfato diferentes olores como yogur, café con leche, perfume, agua, para que se den cuenta de que hay más sentidos que la vista para percibir el mundo que nos rodea.
También experimentan con el tacto intentando adivinar por la forma qué objetos son los que se están tocando y en una superficie con relieve de qué dibujo se trata.
De esta forma empatizan y comprenden las dificultades que tienen las personas ciegas y como entienden lo que pasa a su alrededor a través de otros sentidos que no son la vista.